La cocina del Tarot: El Mago II


Abre la nevera. Inspecciona tu cocina. ¿Qué tienes?

Comencemos a pensar como el arcano de El Mago. Fíjate que en su mesa hay diferentes objetos, cada uno de ellos simboliza uno de los palos de las cartas: bastos, oros, espadas y copas. A su vez cada uno de estos elementos representan un ingrediente, de la tierra, de los minerales, del aire o del agua. También denotan un color, un sabor, una textura.

Podemos pensar en colores y unir aquellos alimentos cuya combinación cromática nos gusta. Podemos hacer una ensalada de verdes, crudos o cocidos. Vale todo: espinacas, lechuga, puerro, guisantes, judías verdes, coles de bruselas, brócoli, perejil, espárragos, pepino (lo incluimos con la cáscara). Todo verde y una salsa de color amarillo, quizás un yogur con un poco de curry o azafrán, sal y aceite. Perfecto, una combinación muy lograda. Quizás nos interesen más los rojos porque nos sentimos eufóricos de energía y calor que necesitamos compartir con alguien. Unamos alimentos de color rojo, todos los que se nos ocurran desde tomates, pimientos, fresas, cerezas, remolachas, manzana, rábano, granada, sandía. ¿Qué podemos hacer con ellos? Lo más fácil será una ensalada. También podemos crear una sopa fría donde la base sea la sandía y los demás ingredientes se conviertan en unos tropezones divertidos o ese toque de sabor diferente si los empleamos en una dosis de 1 a 6, en una parte de ellos por cada seis de sandía.

Podemos pensar en formas y unir todos aquellos alimentos que tengan una forma alargada y así en un plato nos encontraremos con endivias, berenjenas, puerros, calabacines y zanahorias que hemos hecho al horno. Luego los rociamos con un poquito de aceite y una nota de color con pimentón o curry, perejil u orégano.

Podemos pensar en sabores y añadir un toque de fruta a la ensalada de lechuga con granos de uva negra. O quizás caramelizar una cebolla con alguna mermelada, o naranja y azúcar, simplemente como un toque de acompañamiento a unas patatas cocidas en su punto.

El Mago no se pasará horas y más horas en la cocina, le gustan los buenos resultados y rápidos. El Mago no se distingue por su paciencia. Un toque por allí, otro por aquí y zas, ¡sorpresa! Esta es la energía del mago. Le brillan los ojos con un fulgor especial en dichas ocasiones. Y nunca le pidas que siga una receta al pie de la letra, no es su estilo.

Para poder aplicar nuestra magia hay cosa que es mejor que no falten en la despensa, alimentos que nos permitirán conjugar posibilidades. Las hierbas y los básicos de la cocina como patatas, huevos, arroz y alguna verdura pueden salvarnos. No te olvides tener a mano un poco de harina, aceite y azúcar. Los yogures y la leche ayudan mucho. ¿Y un poco de levadura en polvo? También.

Al Mago le gusta crear sabores y las hierbas son un matiz que da mucho juego. Nos es lo mismo unas patatas hervidas que unas patatas hervidas en su punto con un buen chorro de aceite con una mezcla de hierbas. ¿Y un huevo escalfado por encima? Al Mago se le acaba de ocurrir este detalle y mientras pone el agua con vinagre para hacer los huevos, un toque de pimentón dará la tonalidad buscada. ¿No tienes verduras, es domingo, todo está cerrado? Un arroz con hierbas, fácil. Un par de cucharadas de aceite, las hierbas que se te ocurran: tomillo, un poco de estragón, una pizca de menta o hierbabuena, perejil, una buena dosis de orégano y una taza de arroz por cada dos comensales; le das unas vueltas para rehogar un poco durante unos tres minutos o lo que dure una canción corta, dos tazas de agua por cada de arroz (a ser posible caliente, aunque El Mago puede echarla en frío) y en unos diez minutos tendrás tu arroz a las hierbas que puede ser un acompañamiento adecuado o el relleno de ese triste pimiento que te ha quedado en el frigorífico esperando mejor destino. ¿No tienes pan? Un poco de harina con agua, levadura y al horno en unos minutos ya tienes algo parecido al pan.

Todo lo anterior no quiere decir que El Mago no tenga sus alimentos preferidos. Pero cambian según el día que tenga. Al Mago le gusta comer, no le gusta sentirse aprisionado dentro de una receta. Le encanta que sea fácil, bueno y bonito. Luego, otra cosa muy importante son los detalles en la mesa, un toque. Quizás unas velitas o un mantel bonito. ¿Por qué no usar los paños de cocina como individuales? ¡Por qué no! Le gusta adornar la mesa con fruta, nada más bonito que una fuente llena de limones. Con lo que hay en casa es posible hacer algo, mantenerse abierto a las posibilidades y jugar. Con unos limones o unas naranjas partidos a la mitad y vaciados de su pulpa creará unas pequeñas lámparas de velas que darán una luz cálida y perfumada. A las manzanas les hará unos orificios para que funcionen como candelabros. Puede servir el arroz de hierbas dentro de una hoja de lechuga, decorar la mesa con ajos como si fueran los pétalos de unas flores.

1 comentario:

Jesus Lucero dijo...

Hola,
Muy interesante la informacion del blog. Es un post muy completo sobre el tarot y las diversas actividades esotericas! Muy buena informacion
Saludos!